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La Unión Europea podría vetar la venta de televisores 8K por su elevado consumo

En la situación actual, donde los precios de la energía están disparados y las autoridades buscan reducir al máximo el consumo energético debido a la fuerte dependencia del gas y petróleo ruso, la Unión Europea recrudece las exigencias en materia de reducción de consumo que podrían perjudicar seriamente a esta nueva tecnología de televisores 8K.

Según la 8K Association, una organización que no tiene ánimo de lucro y que reúne a los principales fabricantes de esta industria, como son Samsung, Google o Intel, estos modelos más avanzados de televisores podrían ser vetados por Europa como consecuencia de las directivas de energía más estrictas que se están preparando.

Requisitos de eficiencia energética

Desde la 8K Association aseguran estar de acuerdo en querer reducir el consumo de energía en el ecosistema 8K. No obstante, también mencionan que se debería tener un enfoque de ‘sentido común’ hacia este tema, basado en objetivos realistas acordes a los avances técnicos de este área.

Los reguladores obligarán a partir del 1 de marzo de 2023 a que todos los televisores con resolución superior a 4K tengan un índice de eficiencia energética que no superior el 0,90.

Eso quiere decir que las Smart TV 8K y MicroLED deberán consumir la misma energía que los que cuentan con una resolución 4K inferior, algo que es completamente imposible para los fabricantes tal y como están diseñados actualmente estos dispositivos. De esta forma desde la asociación alerta que de convertirse en realidad esta nueva normativa, los televisores 8K deberán ser retirados de las tiendas europeas, ya que serán incapaces de cumplir con la normativa energética.

Objetivo difícil de cumplir

El índice de eficiencia de 0,9 en paneles 8K es muy difícil de conseguir debido a que la densidad de píxeles es mayor que en paneles 4K, y por ende, el ratio de apertura para que la luz incida sobre estos es menor. Es decir, se necesita una retroiluminación mucho más potente que la de un panel 4K para obtener la misma luminancia en pantalla.

A esto se le suma que los paneles 8K necesitan mayor capacidad de procesamiento de imagen, algo que ya consume más energía.

Aún hay demasiado por descubrir y probar en este tipo de tecnologías para reducir su consumo, pero estas mejoras llevan su tiempo.

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